delinterior.com.ar

El subsecretario de Vinculación y Transferencia Científica y Tecnológica, dependiente de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de La Rioja, Walter Gómez, explicó que desde la Unidad Didáctico Productiva se coordina la actividad con los productores, la que consiste en el pesaje, la molienda, la elaboración y envasado del dulce y luego entregárselo al productor o comercializarlo en los puntos de venta que tiene la universidad.

 

Los productores se tienen que acercar por el Parque Tecnológico de la UNLaR; allí, el coordinador de dicha Unidad, Daniel Bermejo, recibirá los frutos y coordinará con el productor. Según el tonelaje, se calcula la cantidad de dulce que se producirá.

 

En este sentido, Gómez explicó que se acuerda con el productor si deja un determinado porcentaje de la fruta a la universidad o paga el servicio completo -para el cual debe acercar todos los elementos-, y luego se hace la entrega completa.

 

“Hemos observado en este último tiempo que muchos productores se acercan, sobre todo los pequeños, que no tienen la posibilidad de ingresar a los grandes centros productivos y se ha notado un crecimiento, en los últimos dos años, de los distintos tipos de frutas que van acercando y nos está yendo bastante bien”, indicó el Subsecretario.

 

Por su parte, el coordinador de las unidades didáctico-productivas de mermeladas y dulces, Daniel Bermejo, precisó: “hemos tenido un muy buen acatamiento de cantidad de productos que hemos realizado y en este momento estamos con membrillo y zapallo, pero ya tenemos productores en cola para lo que es pera y manzana”.

 

Bermejo expresó que “lo importante es que el productor no se sienta acotado. Puede traer 30 o 40 kilos, lo que ellos tengan, ya que se lo puede juntar con lo que llevaron otros productores para hacer el lote completo”. Agregó que “se arranca con 200 kilos” y mencionó que el viernes pasado cubrieron el lote con los frutos de cuatro productores.

 

Además de la fruta, generalmente, el productor aporta azúcar y moldes y la unidad didáctica productiva aporta el gas. Asimismo, se brinda un espacio a los estudiantes que van a aprender sobre la producción. El producto se comienza y termina en un día, el productor deja el fruto y a las 24 horas puede retirar el producto elaborado; que, en el caso del membrillo, dura entre un año y año medio y las mermeladas tienen vida útil de hasta tres años.

 

Los productores deben acercarse a la Subsecretaría de Vinculación Tecnológica (Parque Tecnológico), los días lunes, martes, miércoles y viernes, de 8.00 a 13.00. También pueden comunicarse con el ingeniero Bermejo a través del siguiente número: 380-4443995.

 

Por su parte, el productor de Sañogasta, Oscar de la Vega, contó que desde el 2005 trae los frutos de su cosecha para la elaboración de dulces que luego son comercializados en Córdoba y Buenos Aires. Todos los años trae membrillo, durazno y el año que viene comenzará a traer distintas variedades de ciruela, anunció. “Cuando inauguraron el servicio en la universidad fui uno de los primeros que regalé mil kilos de membrillo “, recordó.

 

Registros

 

Por otra parte, Gómez dijo que “el establecimiento tiene todos los registros que permite la habilitación. Uno de ellos es el Registro Nacional de Empresa (RNE), en el cual, la empresa está habilitada a fabricar productos alimenticios, tiene todas las condiciones bromatológicas para que pueda producir productos alimenticios”. Seguidamente, acotó que también tiene el del Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA) de cada uno de los productos, que representa que ese producto está en condiciones y cumple todas las normas de fabricación para poder ser comercializado”.